El lujoso maestro apesta y se le da al alumno en la audiencia

Este fue el último examen antes de las vacaciones de verano. El maestro sujetó las esposas del alumno al escritorio y ordenó a todos sus compañeros de clase que abandonara la oficina. La señorita Nicoletta y Huch se quedaron solas. La maestra desabrochó la blusa y mostró las tetas del cuarto tamaño, luego se quitó la falda y giró el impresionante botín a la estudiante estupefacta. Una magnífica rubia a media vista con una gran regla en la mano causó pasión animal. Cuando una mujer comenzó a chupar una polla, advirtió que estaba estrictamente prohibida terminar en su boca, y el niño prometió controlarse a sí mismo. Acaba de empezar.